Autora: Liz Wyler | Editorial: Autopublicado | Páginas: 102
Dice la profecía que el príncipe elfo deberá ser desvirgado la noche de su centenario, cuando se alineen en el cielo las dos lunas llenas dibujando una corona roja alrededor de un círculo azul. En ese momento exacto el príncipe deberá concebir a su primera hija, que será la elegida para reunificar y gobernar los cinco reinos élficos, acabando con las guerras, con el hambre y la miseria. Sus novecientos años de vida serán los más prósperos y felices que ningún elfo haya conocido jamás.
La Reina Verde ha organizado un torneo, cuya ganadora se casará con el príncipe elfo y será la encargada de desvirgarlo para hacer realidad la profecía.
Elwing, una cazarrecompensas, se enfrentará a las damas de la nobleza para conseguir ser reina. Lo que no entraba en sus planes era enamorarse de una de ellas.
La Reina Verde ha organizado un torneo, cuya ganadora se casará con el príncipe elfo y será la encargada de desvirgarlo para hacer realidad la profecía.
Elwing, una cazarrecompensas, se enfrentará a las damas de la nobleza para conseguir ser reina. Lo que no entraba en sus planes era enamorarse de una de ellas.
Eldwing es una
cazarecompensas que nunca ha encontrado felicidad dentro de la
miseria de la pobreza. Desde bien pequeña tuvo que trabajar
ejecutando los designios de otras personas, para poder comer y
sobrevivir. No es de extrañar, por esto mismo, que odie intensamente
a las damas elfas; tal y como su instructora siempre le había dicho.

No puedo comentar mucho
más sobre la trama pues, al tratarse de un libro tan cortito, apenas
100 páginas, más información podría suponer un gran spoiler.
Pero, como seguramente habréis podido comprobar, hay algo totalmente
diferente en la sociedad élfica de este libro: se trata de una
sociedad hembrista. Aquí, quienes mandan, son las hembras ya que los
machos no son más que monigotes. Desde este punto de vista, las
elfas son seres despiadados y fríos a quienes no les importa
utilizar a los machos a su uso y disfrute. Para ellas, son tontos,
con nula capacidad de raciocinio.
Leyendo El virgo del
príncipe elfo cada poquito
tiempo, sobre todo cuando se nos introduce la sociedad en la que vive
Eldwing, he torcido mil y una veces el gesto al leer uno u otro
pensamiento. Me irrita demasiado determinadas actitudes. Odio las
injusticias. Mucho. Pero de repente, me di cuenta de que cuando
leemos historias ambientadas en, por ejemplo, la Edad Media no se nos
mueve (yo incluida) ni un pelo al contemplar estas acciones cuando
pasan en el género opuesto porque “es lo normal en aquella época”;
porque aunque realmente no sea normal, estamos tan acostumbrados a
ello que no le damos importancia. Por esto mismo, chapó por la
impresionante vuelta a la tortilla de nuestra percepción por parte
de la autora.
Por otro lado, quizá le falta un poco de profundidad a la trama en sí. La acción pasa demasiado deprisa, batallan mil y una veces pero ni siquiera te da tiempo a asimilar la anterior batalla, cuando ya estas inmersa en otra. Quizá sea por la propia extensión de la historia, ya que 100 páginas no te permiten desarrollar todo lo que la autora intenta abarcar; así que, en mi opinión, yo recortaría batallas y denominaría a El virgo del príncipe elfo relato o añadiría más páginas a la novela.
Para acabar, me gustaría
puntualizar que, tanto si buscáis un libro fantástico, como un
erótico; tenéis en El virgo del príncipe elfo
el libro perfecto para una tarde aburrida. Es una historia amena,
aunque sin muchas pretensiones, donde eso sí, encontrareis muchas
escenas eróticas y unos personajes de los que os podréis encariñar.
Paz,
Sabrin.
3.0/5 – 1289
Ars Noova
No tiene mala pinta, me lo apunto.
ResponderEliminarSaludos
¡Hola!
ResponderEliminarMe mata el título de este libro, pero me interesa mucho por la vuelta que hace a las temáticas de género. Siempre me interesa mucho eso, así que lo tengo apuntado de un tiempo.
¡Un beso!
Hola!
ResponderEliminarMe ha costado entender el título pero al final lo he logrado jaja me parece interesante el planteamiento así que, aunque te haya parecido que faltaban páginas, creo que le daré una oportunidad.
Un beso!